Entrevista a Luis Villa

Luis Villa moderará en UX Spain la mesa redonda «De UX a emprendedor: lo que la UX te contó y no te contó para montar tu empresa». Lleva años en este sector y no os resultará extraño para aquellos que habéis vivido los comienzos de la Experiencia de Usuario en España. Ha estado detrás de grandes y buenos proyectos en Internet y sus reflexiones desde diferentes lugares de la red han ayudado a definir la evolución del concepto. Ha compartido y comparte amistad y profesión con otros muchos participantes de UX Spain y, junto a las personas que integran su mesa, estamos seguros que va a provocar reflexiones muy relevantes para todos. En esta entrevista que aquí publicamos encontrarás razones suficientes para creer que así será.
¿Cuáles fueron tus inicios en la UX?
Mis inicios tuvieron varios ingredientes: inconsciencia, pasión, lectura, escritura, compañeros y proyectos con muy buenos y malos clientes. De todo se aprende siempre. Estos ingredientes no han caducado. Acabo de releer lo escrito y si saco una conclusión es aprender lo básico y acudir al mestizaje.

Soy Licenciado en Derecho y al finalizar mis estudios ejercí como abogado durante año y medio. Entonces descubrí internet y me fascinó. Tras hacerme algunas páginas web, comencé a trabajar sin cobrar en pequeños proveedores de servicios de Asturias haciendo sitios web para empresas e instituciones. Con todo en contra: no era ni programador, ni diseñador.

Luis VillaSi algo tiene el Derecho es que te enseña a estructurar, sintentizar y buscar relaciones entre temas por lo que al final encontré un hueco donde desarrollar mi pasión. De aquella la UX se identificaba con usabilidad o con arquitectura de información. Así que, una vez definida mi identidad, me puse a leer, escribir, programar sitios en PHP como el primer grancomo.com o alzado.org. De aquella no había ni blogs ni WordPress. Acabe de webmaster llevando una tienda online de productos informáticos y videojuegos. De ahí a montar startups y lanzar grandes empresas a internet en Netjuice con mi amigo y mentor: Alberto Knapp. En 2001, cuando reventó la burbuja puntocom, una etapa densa y productiva en consultoría, sistemas y productos tecnológicos complejos en la que he aprendido mucho de cómo sacar proyectos adelante en grandes organizaciones con gran dominio tecnológico y político. Tras esa etapa “invernal”, abandoné la estabilidad de la gran empresa y directo a la entonces pequeña The Cocktail trabajando en diseño de producto incluyendo márketing y explotación, con lo que tenías que ser consciente de las decisiones de diseño y su impacto en el negocio de tu cliente, que es quien te paga.

Hoy en Fjord, trabajo desde una perspectiva más “sistémica” y muy orientada al diseño de experiencias. Como un director en una orquesta, que no toca instrumentos, casi no toco pantallas. He pasado de arquitectura de información a arquitectura de experiencia. Mi trabajo es preparar la maquinaria para que el cliente pueda desplegar sus servicios a través de varios dispositivos y contextos digitales y físicos. Digamos que la experiencia aparentemente caótica con cambio de empresas y sectores de estos años se ha convertido en abstracción.

¿Cómo ves el estado de la UX actualmente?
Veo un sector muy muy fragmentado y en búsqueda de una nueva identidad. Por un lado la UX tradicional  se identifica con web, por otro, creo que no se diferencia cuando se habla de márketing y comunicación con diseño de servicios para el usuario final. Y veo con cierta preocupación la llegada de agencias de publicidad a este campo: están acostumbrando a muchos clientes a dinámicas que no ayudan a la calidad de los servicios: concursos para diseño de servicios cuyo elemento de decisión es la creatividad visual, sin briefing de negocio ni apenas tiempo, ¿cómo puedes diseñar un servicio si ni siquiera entiendes el problema y todas sus implicaciones internas y externas?, la tirada de tarifas (un community manager y un consultor de usabilidad cobran lo mismo por hora según el cuadro de tarifas de agencias). Hay clientes que no diferencian el  negocio de campaña basado en captar mediante impacto, notoriedad y repetición con el de diseño de servicio que tiene una visión de construcción de relaciones a largo plazo. Ambos campos son complementarios, pero cada uno tiene su visión y forma de trabajo.

Veo la UX actual como una confluencia de muchas disciplinas: estrategia, márketing, diseño, tecnología, operaciones, métricas, gestión de personas,… y aquel que mezcle mejor los ingredientes y lo sepa comunicar al mercado liderará, pero no lo venderá como “UX”. Esto va de resultados de negocio: habrá futuro mientras haya profesionales que se preocupen del cliente final y no de ganar premios de creatividad, agradar a comités o engordar su curriculum.

¿Y el futuro?
Una clave está en el “mestizaje” la mezcla de disciplinas. La UX se presenta como una bala de plata contra los silos organizacionales, pero no deja de ser un silo más con un discurso propio y una voluntad de marcar su propio territorio.

Otra clave son los sistemas, pero no solo en tecnología y procesos, sino desde el punto de vista de marca y  experiencia de uso. Hablamos de *experiencias líquidas”. Así como antes en las organizaciones, los datos y los procesos estaban fragmentados en diferentes subsistemas, se han puesto en orden y pasado a diferentes canales de relación con clientes que se presupone tienen que compartir la misma información. Hoy estos canales ya no se piensan desde la tecnología sino como un punto de relación con el usuario por lo que su contenido, comportamiento y apariencia deben tener en cuenta las necesidades del usuario adaptarse a las necesidades y contexto de uso. Pasamos de una visión micro a otra más macro pero la idea es la misma de siempre: ofrecer un gran servicio, pasar de la transacción, commodity cortoplacista a la relación y el vínculo con el cliente.

¿Qué libro/s estás leyendo actualmente? Aunque no sean de UX.
¡Nada de business! Estoy en un momento “retro-humanista”, de vuelta a las raices. Quizá sea la edad, una etapa romántica unido a la preocupación por ver la absurda e inflamable fascinación que provocan los medios de comunicación sobre personas, productos, modas y el producto estrella: “La Crisis”. Como nos distraen de las cosas esenciales y nos alejan de nosotros mismos. Leo historias y experiencias del pasado: arte, diseño, arquitectura, urbanismo. Incomprensión, sufrimiento, superación de dificultades y su efecto en la condición humana. Una mezcla caótica (¿Algún psicólogo en la sala?): Buckminster Fuller, Jane Jacobs, Russell Ackoff, la vida de Serge Gainsbourg, Roland Barthes, Jung, Baudrillard, Joseph Campbell, Suetonio y la Vida de los Doce Césares, Cortázar, Vila-Matas como “meta-narrador”… mitología, narrativa, arquetipos, historia, civilizaciones desaparecidas, ciencia ficción retro y distopías… un caos sobre personas cuyo momento de gloria ya ha pasado o quizás no llegaron a disfrutar en vida. Trato de entender qué herencia han dejado que transcienda su disciplina y pueda ser útil en mi trabajo, en mi vida y ver si puedo dejar algo detrás que merezca la pena.

¿Alguna pincelada sobre la mesa que vas a moderar en UXSpain?
Sí. La idea surgió al ver el baño de realidad que le supone a un profesional de la UX meterse en startups o colaborar con ellas y trabajar bajo la presión de los resultados. Parte del discurso que se utiliza como profesional deviene inútil y poco práctico. Hay mucho juicio de valor sobre buscadores, márketing, gestión de empresa y personas. La idea es que Álvaro Ortiz, Álvaro Varona y Nacho Puell compartan con todos experiencias y prácticas aprendidas en el día a día como responsables de un servicio.

Entrevista a Juan Leal

Juan Leal coordina y modera una de las mesas redondas de UXSpain más complicadas: hacia dónde va nuestra profesión. Una responsabilidad que aceptó desde el primer momento y que implica, entre otras cosas, debatir sobre las incertidumbres que genera la evolución tecnológica y las plataformas digitales en nuestros ámbitos de trabajo.

Todos sabemos que la actual situación se presenta como un extraño cruce de caminos. Nos descoloca a todos y, quizás, hablar de ello y compartirlo publicamente nos permita conocer nuevas perspectivas, opiniones y experiencias. Por ello no puedes perderte esta mesa y tampoco la siguiente entrevista que le hacemos a Juan, donde nos habla de sus inicios y de sus principales preocupaciones al respecto.

¿Cuáles fueron tus inicios en la UX?
Comencé con todo esto cuando estudiaba mi primera carrera: una diplomatura en Educación (Física). Algunos de los apuntes de mi asignatura preferida (Anatomía Humana) eran fotocopias de libros de una editorial en Lisboa: «Editorial Faculdade de Motricidade Humana», decía en el pie. Ese nombre me parecía tan inquietante y exótico a la vez que decidí pegarme un viaje para conocer a fondo la Facultad y ver qué se cocía.

Juan LealEntre sus distintas licenciaturas me encontré con una que llamó la atención más que ninguna: Ergonomía, y al repasar su cuadro académico me entraron muchísimas ganas de estudiar otros 5 años más, sin saber a ciencia cierta cuál sería mi salida profesional, sinceramente.

Simplemente pensé que con esas asignaturas tan «pomposas» algo decente tendría que salir. Una de esas asignaturas ya tenía la palabra «Usabilidad»… Fueron unos años estupendos.

¿Cómo ves el estado de la UX actualmente?
Personalmente creo que no se ha cedido como es debido el «testigo UX», es una metáfora obviamente: no somos nadie para ceder el testigo de nada. Quiero decir que veo que la gente que empieza ahora no se agrupa todo lo que debiera para compartir conocimientos e inquietudes. Y ahora que los que son más mayores dejan de aportar su experiencia en blogs y eventos todo se está oxidando. Nadie tiene la energía ni el interés suficiente para dedicarle más tiempo a esto del UX más allá del horario de trabajo.

Lo más bonito que me ha pasado a lo largo de todos estos años relacionado con mi profesión no ha sido dentro de la oficina, sino fuera de ella, aprendiendo, compartiendo y por qué no, soñando. Esto sólo pasa cuando existen las mismas inquietudes, claro.

¿Y el futuro?
El futuro no lo sé, pero te puedo segurar que, por suerte o por desgracia, seguiremos pegados a una pantalla y me da a mi que cada vez más tiempo. Probablemente no se llame como lo denominamos ahora, pero ¡quién soy yo para cambiarle la etiqueta!

¿Qué libro/s estás leyendo actualmente? Aunque no sean de UX.
Estoy terminando uno fabuloso que me recomendó mi hermano Iván, el pequeño: «El Agente Zigzag», donde narra la historia verídica de uno de los mejores espías de todos los tiempos. Terminé hace poco «Delivering Happiness», que creo que es fundamental para entender un poco mejor todo lo que rodea a una buena Experiencia de Usuario. Y luego tengo otros pocos empezados que no sé cuándo terminaré: la bio de Jobs, «Islam a History», entre otros…

¿Alguna pincelada sobre la mesa que vas a moderar en UXSpain?
Tengo muchas ganas de salgan cosas sobre todo lo que rodea al mundo móvil, que cada vez está más en boca. Hay un montón de lagunas hoy en día sobre todo esto y me parece el marco adecuado para tratar de resolver algunas cuestiones.

La evolución de los perfiles de nuestro sector también es algo que me inquieta y que creo que tiene cabida en esta mesa. Viendo la calidad de los ponentes que tenemos en el evento creo que se abordarán los mismos temas en más de una ocasión. Lo bueno aquí será el enfoque que cada uno le dé.

Tocar el tema del estado de nuestra profesión aquí en nuestro país y cómo vemos lo que pasa fuera de nuestras fronteras también me parece interesante.

Creo que saldrán cuestiones que darán para hablar un buen rato.

Entrevista a Daniel Torres Burriel

Como se suele decir, nuestro protagonista de hoy no necesita presentación: Daniel es un viejo conocido de todos. Lleva publicando de forma ininterrumpida en su blog desde casi una década (que se dice pronto), y desde su cuartel general en su querida Zaragoza se dedica como profesional independiente tanto a la consultoría como a la formación en UX.

¿Cómo llegaste al mundo de la Usabilidad y la UX?

Pues de una forma un poco secuencial. Yo trabajaba como diseñador web en una compañía, y como lo mío nunca ha sido el dibujo, poco a poco me iba apartando de todo lo que tiene que ver con el mundo creativo. Eso no era lo mío. Me sumergí por completo en el corazón de los proyectos, tocando el código de la capa front.

El diseño con estándares y la accesibilidad web me fueron llevando poco a poco a investigar mucho más (ya que me iba formando por mi cuenta a base de leer y leer), y empecé a leer a gente como Nielsen, Zeldman, Spool, Budd… ahí empezó todo. Luego fui uniendo, poco a poco, los problemas que nos llegaban de los clientes con lo que hacíamos en los proyectos. La ecuación estaba clara: tecnológicamente los proyectos eran impecables, pero la capa de negocio tenía aún mucho recorrido que implementar. Ahí había un problema y poco a poco fui descubriendo cómo a través de pensar un poco más los proyectos desde una perspectiva de usuario se podía mejorar mucho.

¿Cómo ves el estado de la profesión?

Desde mi perspectiva está en un buen momento. Y lo digo porque mi contacto con la realidad de la gente que se quiere formar en esta disciplina es abundante, y hemos pasado de un tiempo en el que directamente la oferta de formación era muy escasa, a un momento en el que hay varias opciones, mucha gente interesada y, sobre todo, las empresas que (en mi caso) piden formación, ya no son estudios creativos o empresas de desarrollo, sino que son empresas puntocom ya consolidadas, y startups.

En tu caso, a parte de la consultoría has apostado muy fuerte por la formación. Explícanos un poco tu experiencia hasta ahora y cómo ves la evolución de la formación en UX.

Pues lo que te comentaba en la pregunta anterior. Personalmente he puesto el foco en la formación por una cuestión de demanda. Los clientes me pedían formación y me he limitado a ofrecer a todo el mundo lo que desde hace años ya venía haciendo. Ha sido más una cuestión de estrategia empresarial que otra cosa. Y de momento los resultados me hacen estar contento. Hay demanda tanto de formación presencial como de formación online. Y puedo decir que por las clases han pasado casi 100 personas en 2 años. No puedo decir que la disciplina esté huérfana de gente interesada de verdad.

¿Qué libro/s estás leyendo ultimamente? Aunque no sean de UX.

Estoy leyendo el útimo de Iñaki Gabilondo (El fin de una época) y la biografía de Steve Jobs. De UX ahora mismo no estoy leyendo nada, así en plan rebelde :D

El título de la mesa redonda que coordinarás en UXSpain destila mucha «realidad», explícanos un poco el porqué y el criterio de selección de las participantes.

Es casi una terapia para mi cuando propuse esa temática. En mis años de desarrollo de trabajo en una compañía en la que el 80% de la plantilla eran programadores desarrollé una sensibilidad muy especial respecto de la convivencia de perfiles profesionales que en algunas ocasiones parecen ser antagónicos, por mucho que trabajen en el mismo proyecto.

Creo que los profesionales de la UX en España tenemos una asignatura pendiente, que consiste en dejar de ser francotiradores, y desarrollar nuestras habilidades para convivir en equipos de trabajo, tanto multidisciplinares, como en granjas de programadores. Esa es la realidad laboral y creo que tenemos trabajo en la integración de nuestro discurso con la base: con la gente que dedica su tiempo a picar código. Son, además de los project managers, nuestros mejores aliados en la consecución de las metas de la disciplina.

Por eso queremos ver en la mesa redonda cómo se ha buscado la vida la gente a la hora de desarrollar su trabajo profesional dentro de equipos multidisciplinares. O simplemente dentro de un marco laboral con varios perfiles.